El símbolo de la isla de Gran Canaria es el Roque Nublo, una aguja de 1 813 metros de altura, de forma curiosa de que se eleva sobre el paisaje. Este es el último recuerdo de un cráter erosionado. Esta formación rocosa situada en el centro de la isla siempre ha inspirado la fantasía de los hombres ; los primeros habitantes de las Islas Canarias se comprometieron adorarle. Cuando retazos de niebla cubren la parte superior, «la nube acantilado» tiene una dimensión mística. A la luz de la aurora, por contra, es muy majestuosa.
Los excursionistas podrán disfrutar de la subida desde el norte porque es muy bello en cuanto a paisajes : Hora de Tejeda y cruzando el verde Barranco de La Culata. A partir de ahí, cruzamos bosques de pinos para llegar al acantilado. Durante la caminata, nunca perder de vista el Roque Nublo y su pequeña vecina, Roque El Fraile (el monje). La meseta en el camino ofrece una magnífica vista sobre la isla y en Tenerife con el Teide, la montaña más alta de España.
La Cruz de Tejeda
La Cruz de Tejeda se encuentra en 1.494 metros y es el punto de encuentro de todos los caminos de la costa.
Muchas rutas de senderismo (de 2 a 5 horas), los caminos reyales, comienzan a partir de este punto.
Los bosques más bellos de Gran Canaria, el Pinar de Tamadaba, está situado a 8 kilómetros al oeste de ese punto.